Este texto nos presenta una grave advertencia en contra de la independencia, autosuficiencia o cualquier forma de vida apartada de Jesús.
Nos dice lo que pasa:
1. Ser desechado. El árbol no puede permitir que una rama intente a su vez ser independiente pero también alimentarse del árbol.
2. Sequedad. No ocurre de forma instantánea, pero al no estar recibiendo la vida del árbol, la rama no puede seguir viviendo por mucho tiempo, se seca.
3. Fragilidad. Al secarse la rama es vulnerable, pierde la flexibilidad, se vuelve fácilmente consumible por el fuego.
4. Se queman: tal vez sugiriendo su destino eterno. Pero se queman principalmente porque "ya" estaban secas.
2. Sequedad. No ocurre de forma instantánea, pero al no estar recibiendo la vida del árbol, la rama no puede seguir viviendo por mucho tiempo, se seca.
3. Fragilidad. Al secarse la rama es vulnerable, pierde la flexibilidad, se vuelve fácilmente consumible por el fuego.
4. Se queman: tal vez sugiriendo su destino eterno. Pero se queman principalmente porque "ya" estaban secas.
Un punto para reflexionar muy importante es que la permanencia no es ni se trata de algo que uno aprende a hacer, no es ir a la iglesia, no es hablar como cristiano, ni siquiera se trata de orar, leer la biblia y ofrendar. Ser cristiano no es aprender una forma de comportarse o de hablar, es SER TRANSFORMADO interiormente por Jesús, tener amistad con Él, escucharlo y obedecerlo.
¿Cómo era mi vida sin Jesús? ¿Cómo sería hoy sin Él? ¿En qué debería ser transformado?
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